El mar de Isola Rossa besa al Hotel Marinedda
Un oasis de relax y belleza en la Costa Rossa en el norte de Cerdeña.
En la Cerdeña más fascinante, hecha de azul, verde y rojo de granito, el Hotel Marinedda se erige como un oasis, situado frente al mar y a la playa de arena clara, en una posición privilegiada. Frente a la bahía de La Marinedda con Punta Li Canneddi, que acoge con un abrazo amable, invitando a descubrir.
Reafirmando su Bandera Azul, la playa libre de La Marinedda es fácilmente accesible a pie desde el hotel o con el servicio de transporte gratuito disponible todos los días para ayudarlo con el transporte de bolsas y juguetes para niños.
El Beach Bar y las actividades
El bar de playa en la playa de La Marinedda es perfecto para disfrutar de una bebida fresca entre un chapuzón y otro, además de ser un lugar conveniente para cambiarse, refrescarse con una ducha o pedir ayuda a nuestro personal sin necesidad de regresar al hotel.
En la playa libre de La Marinedda, es posible alquilar sombrillas y tumbonas en el área reservada para el hotel y realizar cursos de vela, windsurf y buceo. Los amantes de los paseos pueden descubrir las hermosas calas de arena entre las rocas rojas que bordean ambos lados de la playa, disfrutando de las típicas transparencias marinas de la hermosa Cerdeña, con una naturaleza intacta y fragante a sus espaldas.
Un toque de magia: La Sirenita
¿Alguna vez has visto la película La Sirenita? Bueno, sus escenas marinas fueron filmadas en las playas de los alrededores. Sí, caminarás sobre el mismo suelo que sigue haciendo soñar a los niños de todo el mundo. Un toque adicional de magia a estos paisajes llenos de encanto.
Aquellos que aman la tranquilidad encontrarán calas escondidas y senderos para seguir entre las rocas rojas, donde el mar de Cerdeña revela sus más hermosas transparencias. Mientras tanto, la naturaleza salvaje te envuelve como un manto, dejando en el aire sus inolvidables perfumes.
Badesi y sus regalos
Desde Isola Rossa, puedes llegar en 5 minutos en bote inflable o con un paseo de 30 minutos a la larga y salvaje playa de Badesi, donde aún puedes descubrir la emoción de un baño de sol y mar en versión “natural” o recolectar conchas y maderas traídas por el mistral.